Baftas 2014, Red Carpet a Juicio: lo peor y lo menos peor

 

 

 

 

Los Bafta, los galardones otorgados por la Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de la Televisión (BAFTA), considerados como la antesala de los Oscar, tanto que dicen que viendo quiénes han sido los galardonados con un Bafta  se puede predecir quiénes serán los que se lleven los Oscar.

Y sin embargo, imaginaos cual ha sido mi sorpresa cuando al ver la Red Carpet descubro que ¡prácticamente no conozco a ninguna ni a ninguno de los que hicieron el paseíllo!

Vamos que ante la larga lista de desconocidas, desistí de tirar de Wikipedia para averiguar quién es quién, dónde ha aparecido en la pequeña o en la gran pantalla,…

Claro que lo mismo dirán los británicos de nuestras actrices y actores que se pasearon por la Red Carpet de los Goya. Pero es que… ¡¡nosotros no nos vanagloriamos de ser la antesala de los Oscars!!, ¿verdad?

En fin, tras esta declaración de ignorancia en cuanto a la industria cinematográfica y televisiva británica, paso a céntrame en EL TEMA: los modelitos que se pasearon por la Red Carpet de los Bafta J

Así que, como siempre, empiezo intentando encontrar MI vestido rojo perfecto para la lucir en la Red Carpet de mis sueños y…

Está visto que este año no lo voy a encontrar. Sólo encuentro cuatro: el de Eleanor Tomlimson de estilo corte imperio (manguitas abullonaditas incluidas) y transparencias; el Givenchy de Imogen Poots con una especie de bandas cruzadas en la parte superior y una falda plisada que…; el de Joely Richardson con lo que quiera que sea eso que lleva a la cadera, ¿corona de plumas bordada¿…?; y finalmente el de Emma Thompsom pero como va tapado por ese abrigo blanco, poco puedo decir, aunque por lo que se adivina…  ¡Vamos que ni regalados me los pondría!

En fin, que tras otra decepción más y confiando en que los Oscars me den un alegrón en forma de un maravilloso RED dress, continúo echándole un ojo a esta Bafta’s Red Carpet y la verdad es que las únicas que encuentro que pueden tener un pase son la maravillosa Helen Mirren que como siempre está perfecta, Amy Adams con un vestido negro de Victoria Beckham y Angelina Jolie con un tuxedo de Yves Saint Laurent.

Eso sí, aunque Angelina Jolie está guapísima con ese tuxedo con la camisa abierta, la pajarita deshecha, la chaqueta con las mangas dobladas, esos pantalones pitillo tobilleros, la melena suelta y un maquillaje muy natural, para mi gusto no es un look de Red Carpet, sino para salir una noche a cenar en plan chic o para una fiesta de menos “postín”, más de amigos.

También me gustaron por sencillos, elegantes y con muy buen gusto los modelos lucidos por Laura Haddock y Samantha Barks. No corrieron riesgos, pero visto lo visto fue la mejor elección que pudieron hacer, je, je, je.

El toque de color lo pusieron Lupita Nyong’o con un vestido de Christian Dior verde esmeralda precioso; Lily Allen que, por muy Vivienne Westwood que fuera su vestido, no me gustó nada, además esa combinación de rojo y fucsia es de hace un par de años cuando se impuso el “color block”, ¿no?, aunque también tiene reminiscencias de los 60 cuando se llevaban los labios así, cada uno de un color; y Naomie Harris que llevó un vestido rosa con un escote de los que yo llamo “ombligueros” y rajaza lateral que, pese a ser bonito, no lucía nada tanto por su figura como por su actitud, su pose.

Y ahora toca hablar de los horrores de la noche.

De los modelos que lucieron la acompañante de Matthew Modine (irreconocible él), Sophie Kennedy Clark, Jemima Reoper y Gwendoline Christie (Brienne de Tarth en Juego de Tronos) sólo puedo decir dos palabras: NO COMMENTS!! Y es que como empiece a hablar de ellos, no paro de despellejarlos hasta mañana, ja, ja, ja.

Claro que no fueron las únicas en ir desacertadas, que estuvieron muy bien acompañadas por Tuppence Middleton, Lea Seydoux y Felicitas Rombold (con un perfil muuuuy raro, ¿¿no??).

Y no sigo enseñándoos más desaciertos ni más horrores porque no es cuestión de acabar desmitificando las Red Carpet y el glamour que se supone debería acompañaralas.

Pero es que… este año se están luciendo de lo lindo. Ni la de los Grammy, ni la de los Goyas, ni mucho menos la de los Bafta, … si acaso se ha salvado y por los pelos la de los Golden Globes. A ver si la de los Oscars nos devuelve un poco de la elegancia, buen gusto y glamour que no estamos viendo este años.

Claro que… a lo mejor soy yo que este año está un pelín exigente y un mucho criticona, ¿qué creéis? ¿son las Red Carpets o soy yo? :-P

Besazos!!