Sábado:
Nada
más llegar a clase Carminia nos dice que hoy vamos a practicar maquillaje
Primavera-Verano y Otoño-Invierno teniendo en mente el círculo cromático y la
teoría del color.
Y
es que entre las diferentes divisiones e interpretaciones que se pueden hacer
del círculo cromático, una de ellas es en función de la temperatura ya que podemos
dividirlo en dos mitades: los colores fríos que son aquellos en los que en su
composición entra el azul en mayor o menor medida y los colores cálidos que son
aquellos en cuya composición entra el rojo y el amarillo.
Por ello, en función de la armonía por
temperatura en un maquillaje de
Primavera-Verano se utilizaran colores cálidos y en un maquillaje de Otoño-Invierno colores fríos. Pudiéndose utilizar en
ambos maquillajes tonos neutros en ojos, mejillas o boca para romper un poco la
unidad y que haya un poco de contraste.
Por otro lado, en verano solemos a llevar un
maquillaje más ligero, mientras que en invierno tendemos a uno un poco más
elaborado. Yo misma suelo tener una base de maquillaje para primavera-verano,
más ligero y con un acabado jugoso, y otro para otoño-invierno, con un poco más
de cobertura y un acabado aterciopelado.
Y lo mismo me pasa con el maquillaje. Tiendo
a llevar los ojos más marcados en invierno y más naturales en verano.
Claro que como en maquillaje no hay reglas
fijas, esto son sólo unas puntualizaciones básicas a tener en cuenta.
Lo mismo que pasa con el maquillaje de día y
el maquillaje de noche. Es decir, que no hay porqué relegar un ahumado al maquillaje de noche, ni un
efecto “cara lavada” al maquillaje
de día. Todo es cuestión de gustos y de
que nos sintamos cómodas llevando el maquillaje que llevemos.
Sin embargo, en cuestión de Maquillaje Social son aspectos que
hemos de tener en cuenta y dominar muy bien, ya que si bien no son reglas fijas
sí es lo que más de una clienta nos pueda pedir.
Así
que, lo dicho, hoy toca soltar pinceles y andar un poco más relajadas con el
tiempo ya que en vez de la media hora que nos estaba pidiendo hasta ahora, nos
deja 40-45 minutos, ¡¡genial!!
Y
es que aunque está muy bien que nos exijan rapidez, ya que es lo que se nos va
a exigir tanto en fotografía, moda o pasarela, creo que primero tenemos que
saber maquillar bien, tenemos que haber dominado todos los pasos del maquillaje
de forma que maquillemos de forma natural, sin tener que pensar “ahora toca
esto, ahora toca lo otro”, y una vez conseguido esto vendrá la rapidez.
Aunque…
también es cierto que si no nos metieran un poco de prisa en ocasiones nos
eternizaríamos intentando que nos quedara PER-FEC-TO. Y eso para las que
tendemos a ser perfeccionistas y superautoexigentes…
Eso
sí, reconozco que el trabajar sin la presión de los 30 minutos, hace que
maquille más relajadamente y en los dos maquillajes de esta tarde en ninguno
llegué a tardar más de 35-40 minutos.
Tras
hacer cada una un maquillaje de P/V y otro de O/I con un descanso entremedias
para descansar tanto nosotras como nuestras caras (je, je, je), termina
Carminia la clase enseñándonos a maquillar la boca, algo con lo que siempre
estamos luchando.
Y
es que parecerá mentira, pero así como nos resulta fácil maquillarnos a una
misma la boca y tendemos a luchar con los ojos, a la hora de maquillar a otra
persona, los términos se invierten ¡¡¿…?!!
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