Disfruta del momento… paso 45: Modifica tu rutina

 

No creo que haya nada más perjudicial para Disfrutar del Momento Presente que caer en la rutina. El hacer día tras días las mismas cosas de la misma forma hace que nuestros sentidos entren en tal estado de embotamiento que cuando nos preguntan algo tan sencillo como qué comiste ayer la mayoría de las veces no lo recordemos.

Y lo que es peor, que al convertirse en rutinarias determinadas actividades que en su momento iniciamos porque nos gustaban, no sólo dejamos de disfrutarlas sino que en ocasiones llegan a resultarnos tediosas y las hacemos porque sí, porque es lo que toca hacer.

Y lo mismo pasa con las relaciones. Ya se sabe aquello de que “no hay nada más peligroso para el amor que caer en la rutina, en el tedio”.

Pues bien, hoy toca darnos un toque de atención y luchar contra la rutina para volver a Disfrutar del Momento.

Pero no es cuestión de romper con la rutina por las buenas, liarse la manta a la cabeza y cambiarlo todo de golpe. Simplemente con que hagamos un pequeño cambio en la forma de realizar una determinada actividad comprobaremos que, primero de todo, hemos de centrar nuestra atención a lo que estamos haciendo.

Algo tan tonto como cambiar la forma de lavarnos los dientes (con la otra mano, empezar por arriba en vez de por abajo, desde dentro hacia afuera en vez de al revés,…, sin jugar al Candy Crush que estamos todos enviciaditos, ja, ja, ja) hace que en vez de tener la mente en otro sitio, la tengamos centrada en lo que estamos haciendo y que, por tanto, nos centremos en hacerlo bien y disfrutemos de la actividad.

Bueno, no de lavarse los dientes, je, je, je, pero si, por ejemplo, a la hora de cocinar en vez de hacer… yo que sé… la tortilla francesa como la haces siempre, decides que en vez de sal le vas a echar unas especias, o que en vez de alargada la vas a hacer ¿cuadrada?, o que en vez de batir el huevo a mano lo bates con… ¿la taladradora tuneada? ;-.P Verás que tienes que concentrarte en el proceso, que retomarás el gusto por cocinar, y que te saldrá la tortilla francesa más rica y bonita del mundo ;-P

O el café de la mañana en la cafetería de siempre, ¿por qué no cambias hoy y lo tomas en otra cafetería? O tómatelo en la de siempre si no quieres cambiar, pero no tomes café, pide otra cosa. O… no te lo tomes en la mesa del trabajo y tómatelo junto a la máquina del café y así charla un poquito con quien venga a sacarse el café mañanero.

El caso es hacer pequeños cambios, no hacer siempre lo mismo. De esta forma nuestra atención estará centrada en todo momento en el presente, en lo que estamos haciendo en vez de estar rumiando los problemas que nos rondan siempre y que hacen que no disfrutemos de la vida, de lo que hacemos en cada momento.

Además, esos pequeños cambios también ayudarán a que recordemos qué hicimos tal día, qué cenamos (¿te acuerdas del día de la tortilla francesa cuadrada?, ja, ja, ja), dónde estuvimos.

Y de esta forma recuperemos el interés por … cocinar, el café de la mañana, hacer deporte, divertirnos, …, a fin de cuentas dejar de ser el robot en el que en ocasiones nos convertimos, sobretodo según van pasando los años en los que parece que perdemos la ilusión por descubrir cosas nuevas, sitios nuevos, gente nueva,…

Para Disfrutar del Momento y estar siempre conectados con el Presente hemos de huir de la rutina, intentar no hacer siempre lo mismo de la misma forma el mismo día a la misma hora y con la misma gente.

Como “anécdota tonta” para daros un ejemplo de lo dicho, os diré que un día se me ocurrió hacer un mínimo, minimísimo cambio a la hora de poner la lavadora, tan sólo cambié el orden y en vez de ponerla después de hacer la cama, la puse antes y… como no estaba centrada en lo que estaba haciendo, en ese mínimo cambio… ¡¡me dejé la mitad de las cosas sin meter y ni me di cuenta que estaba poniendo la lavadora a la mitad!! 

Así que… luchemos contra la rutina, seamos conscientes de lo que hacemos en cada momento y, sobre todo y por encima de todo, ¡¡disfrutemos en todo momento de lo que estamos haciendo!!

Besazos!!

¿Quieres recordar el paso anterior? Ve al paso 44: Come conscientemente