viernes, 12 de abril de 2013

Tardes de cultura y charla: Un paseo por el Museo D’Orsay

 
Muy buenas!!
 
Una vez más y gracias, otra vez, a la Fundación Mapfre (en su sala del Pº de Recoletos), aquellos que como yo somos amantes del Impresionismo, podemos visitar el Museo D’Orsay sin movernos de Madrid.


 
Hace un par de años, creo recordar que mientras se estaban realizando unas obras de remodelación en el Museo D’Orsay, la Fundación Mapfre ya nos trajo una magnífica representación de lo mejorcito del movimiento Impresionista. Dicha exposición tuvo tanta aceptación, que ahora nos la complementan trayéndonos 78 obras correspondientes al periodo final del Impresionismo y al surgimiento del Postimpresionismo.
 
Así que mientras llega el día en que pueda tener el placer de pasearme por las salas del Museo D’Orsay, he podido disfrutar de esta exposición que me ha permitido ver cuadros que sólo conocía por libros de arte y... por mucho que haya avanzado hoy en día la fotografía, la calidad del papel e impresión y demás… nunca, jamás de los jamases, se acercarán lo suficiente al color, a la textura, a… todo del original. Por ello, no hay que perderse estas oportunidades únicas.
 
La exposición está organizada por salas en función de los pintores y movimientos más representativos.
 
MONET
 
 
Tras la última exposición de 1886, los impresionistas dejaron de representar temas relativos a la ciudad moderna y sus alrededores, para centrarse en otros que les permiten expresar mejor sus preocupaciones plásticas. Así Monet, partir de 1890 empieza a pintar sus series dedicadas a los almiares (1890), los álamos (1891) y la catedral de Ruan (1892-93).
 
 
En Giverny, Monet comienza la serie de nenúfares, desapareciendo todo resto de perspectiva, mientras que sus motivos se disuelven una atmósfera cada vez más abstracta y lírica; lo mismo que en sus vistas del Parlamento de Londres (1904).
 
RENOIR
 
 
En 1880, Renoir volvió a participar en el Salón Académico obteniendo un gran éxito gracias a sus retratos (sólo se puede apreciar de verdad “en vivo y en directo” de lo llamativo y único del rojo del fondo del retrato de Fernand Halphen de niño).
 
CÉZANNE Y SU INFLUENCIA
 
 
Cézanne, al sentir la necesidad de romper con las reglas y de sobrepasar los límites que impone la técnica impresionista, fue el nexo de unión entre el impresionismo y el postimpresionismo.
 
Como se puede observar en Manzanas y Naranjas, Cézanne insiste en el papel desempeñado por los diferentes aspectos de la composición, abriendo el camino que conduciría al cubismo.
 
TOULOUSE-LAUTREC Y MONTMARTRE
 
 
Toulouse-Lautrec, en 1886, conoce a Van Gogh, Bernard y Anquetin (retrato de Henry Samay), y los cuatro empiezan a exponer bajo el nombre de «impresionistas del petit boulevard».
 
 
 
Toulouse-Lautrec a través del retrato de las grandes divas del Moulin Rouge (La payasa Cha-U-Kao) inaugurará una nueva manera de pintar, de una gran simplificación y austeridad de recursos.
 
EL NEOIMPRESIONISMO
 
 
Ante la insistencia de Camine Pissarro, sus amigos Georges Seurat y Paul Signac (La entrada del puerto de Marsella y El Palacio de los Papas) participaron obras «puntillistas», lo que generó una fuerte controversia, en la octava y última exposición impresionista.
 
El crítico de arte Félix Fénéon inventó el término «neoimpresionismo» para definir este nuevo estilo pictórico en el que los colores puros (aplicados mediante pequeños puntos) se yuxtaponen, favoreciendo la mezcla óptica de los colo­res en el ojo y no en la paleta.
 
VAN GOGH
 





 
En 1886, Vincent van Gogh, junto a sus amigos Toulouse-Lautrec, Louis Anquetin y Émile Bernard. pinta los barrios de París, haciendo un uso muy expresivo e intenso del color (El merendero de Montmartre (1886), El restaurante de la Sirène en Asnières (1887)).

 
En febrero de 1888, Van Gogh viaja a Arlés, donde trabaja en el poder de sugestión de los colores y en el significado simbólico que estos permiten.
 
 
Durante las nueve semanas en que Van Gogh y Gauguin compartieron en Arlés (cuyo trágico final conocemos todos), Van Gogh acrecentó su familiaridad con un sincretismo radical, de planos de color bordeados con gruesos y oscuros (El salón de baile en Arlés (1888)).
 
GAUGUIN Y PONT-AVEN
 
En 1886, Gauguin se instala en la localidad de Pont-Aven (que acogía una colonia cos­mopolita de artistas que conseguían vivir con casi nada), donde dice encon­trar «lo salvaje, lo primitivo». Desde 1860 este lugar.
 
En ese ambiente, Gauguin conoce Émile Bernard, con el que elabora una nueva manera de pintar que elimina los detalles y contornea las formas planas mediante un trazo negro que recuerda al plomo de las vidrieras.
 
NABIS
 
Alrededor de la emoción suscitada por el cuadro El talismán que Sérusier pintó en 1888 bajo el dictado de Gauguin, se reunió un grupo de artistas autodenominado «nabi» que concebía la pintura «como un grupo de acordes, alejados definitivamente de la idea naturalista».
 
 
Sin embargo, los nabis son muy diferentes entre sí: Pierre Bonnard y Émile Vuillard exploran notas intimistas y sensibles; Ker-Xavier Roussel se concentra en temas bucólicos; y Maurice Denis (El minueto de la princesa Maleine), Paul Sérusier y Paul Ranson se decantan por una mística de corte católico.
 
Pese a que para mi gusto que estuvo muchiiiiiiiiiisimo mejor la que trajeron hace unos años, como habréis podido ver la exposición merece una visita en toda regla, además el acceso es gratuito ;-D y aunque cuando yo fui no había que esperar mucho para acceder, si queréis evitar colas podéis acceder la página web de la Fundación Mapfre y reservar con antelación día y hora (eso sí, dáros prisa que termina en mayo).
 
Por último quiero dejar claro que, aunque me encanta el arte impresionista, sólo soy una aficionada, por ello lo que he escrito de la exposición es un breve resumen del folleto explicativo de la misma, mientras que los cuadros (una pequeña muestra de los que más me gustaron) proceden de la web del Museo D’Orsay.
 
Espero haberos animado a visitarla y que si lo hacéis me contéis si os ha gustado tanto como a mí.
 
Besos!!


No hay comentarios:

Publicar un comentario